Autorretrato.

Para este trabajo, nos pidieron que nos autorretratasemos y a mi se me a ocurrido mezclar varias ideas de mi día a día y de mis gustos. 

He querido remarcar el graffiti y mi ropa la cual me identifica, también e querido representar que no solo somos un físico o unos gustos, si no que tenemos un interior el cual está siempre presente. 

El esqueleto nos sujeta, los músculos nos dan fuerza, el cuerpo nos identifica, nos hace pensar, y finalmente la ropa nos caracteriza y nos da el último toque de personalidad. 

Vivo con el graffiti a diario, y se podría decir que cuando estás dentro y de verdad te gusta, llegas a considerarlo una enfermedad o adicción la cual no puedes dejar, cada vez quieres más y más, nuevos sitios, nuevas formas, nuevos estilos, no es cuestión de ensuciar, el verdadero graffitero va a hacer arte y no tres firmas chapuceras en una pared. 

Un saludo desde el Instituto Veritas al blog artístico de Marta.